Esta es una semana de victorias que invita a maravillarnos. Hemos tenido la oportunidad de ver al fundador obrando sigilosamente en la vida de sus vástagos; él se pasea en nuestros desiertos y mientras camina se abren las puertas, llueve sobre tierra seca y reverdecen los prados. No hay imposible para Dios, sanidad y libertad trae consigo para los que se acercan a él; y aún los que lloran, bienaventurados son, porque ellos recibirán consolación.

Mi humanidad imperfecta es, imperfecto soy e indigno de la gracia y magnificencia de Dios; pero la misericordia reposó sobre mí, no por obra, sino por gracia. Él es refrigerio para mi alma y medicina para mis huesos. Diré yo a Jehová: esperanza mía, castillo mío; mi Dios, en quien confiaré. Me alegraré con los que me dijeren: a la casa de Jehová iremos; porque ciertamente mejor es un día en sus atrios que mil fuera de ellos.

Ahora estamos en un festival, y este festival enciende la luz de los más entusiastas de la música y la canción; de todas partes se levantan los canticos. Las melodías y canciones son una manifestación de lo que hay en el corazón. En el festival se valora la excelencia, se disfruta la pasión y se exhorta a la fraternidad; semana tras semana los miembros activos se unen a la fiesta virtual, y en la colmena se escuchan las voces e instrumentos como estruendos y susurros de muchos.

Ronda número tres que termina con “No Imposible Para Dios”. La canción la conocí hace poco; nuestro líder pastoral en la iglesia local lo ha cantado varias veces en los últimos días, aunque sin música. Por eso investigué la raíz de la canción; son realmente escasas las versiones de este himno clásico de la fe. Pero me alegro de haber encontrado una versión para ensamblar, versión que hoy les comparto.

Bendiciones, paz y alegrías para todos los que procuran el bien. Amén.

This is a week of victories that invites us to marvel. We have had the opportunity to see the founder working stealthily in the lives of his offspring; he walks in our deserts and as he walks the doors open, it rains on dry land and the meadows are green. There is nothing impossible for God, healing and freedom brings with it for those who approach him; and even those who cry, blessed are they, because they will receive consolation.

My imperfect humanity is, imperfect I am and unworthy of the grace and magnificence of God; but mercy rested on me, not by work, but by grace. He is refreshment to my soul and medicine to my bones. I will say to Jehovah: my hope, my castle; my God, in whom I will trust. I will rejoice with those who tell me: to the house of the Lord we will go; for certainly better is one day in his courts than a thousand outside of them.

Now we are in a festival, and this festival turns on the light of the most enthusiastic of music and song; songs rise up from everywhere. The melodies and songs are a manifestation of what is in the heart. In the festival excellence is valued, passion is enjoyed and fraternity is exhorted; week after week active members join the virtual party, and in the hive the voices and instruments are heard as rumbles and whispers of many.

Round number three that ends with "Not Impossible For God." I met the song recently; our pastoral leader at the local church has sung it several times in recent days, albeit without music. That's why I investigated the root of the song; the versions of this classic hymn of faith are really scarce. But I'm glad I found a version to assemble, a version that I'm sharing with you today.

Blessings, peace and joy to all who seek good. Amen.

No Hay Imposible para Dios
_"Letra"

No hay imposible para Dios,
no lo hay, no lo hay;
mi Dios tiene todo poder.
Él hizo todo lo que existe,
el cielo, tierra y mar;
mi Dios tiene todo poder.