Recordando viejos caprichos 🇻🇪 | Videoblog

Hay que saber buscarse amigos, para que así, cuando planeen visitarte, puedas estar seguro de que tendrán en cuenta exactamente lo que te gusta. Felicidad asegurada.

Yo tengo unos cuantos amigos maravillosos que, no olvidan mis incesantes búsquedas para probar cosas nuevas, pero que también recuerdan muy bien esos pequeños caprichos a los que yo no paraba de recurrir.

Este mes de Julio ha estado lleno de cosas divertidas, entre las que me llegó un paquetito con golosinas y productos que solía disfrutar mucho cuando vivía en Venezuela, cosas que hace bastante tiempo no había vuelto a degustar.

Así que hago un repaso por cada uno de ellos, mientras voy probando en el video, nuevamente, esos placenteros artículos que tanto extrañaba y que, definitivamente, me siguen gustando.

Primero comenzamos adentrándonos en el delicioso mundo de las galletas. Hace mucho tiempo que no probaba el Gayetón de la marca Danibisk, por lo que era el producto que más ganas tenía de rememorar, así que decidí iniciar la cata con ellas. Probé dos versiones y quedé muy satisfecha.

A continuación vinieron muchos recuerdos a mi mente con la María de chocolate de Puig y el Flaquito de St. Moritz. Productos que consumía muchísimo en mi época universitaria y que estuve extrañando durante mucho tiempo.

La segunda parte del regalo consistía en unas botellas de ron especial, reservas de marcas muy reconocidas por su calidad a nivel nacional.

Recibí una botella del magnifico ron Santa Teresa 1796 Solera, una bebida que siempre me ha encantado y que suelo disfrutar en ocasiones muy especiales. Esta botella es la edición conmemorativa del 200 aniversario de la Hacienda Santa Teresa.

Me encantó recibirla porque, a pesar de conseguirla en el mercado Español, suele tener un precio de 52,00 € aproximadamente, por lo que no es una botella que me permita comprar todo el tiempo. Un regalo excelso.

La segunda botella fue una sorpresa, pues hasta ahora no la había probado. Se trata del Ron Añejo Carúpano. Reserva Exclusiva 12 Años. Por curiosidad busqué el precio de este ron en el mercado Español y se puede conseguir por unos 45,00 €, ya me había dicho mi amigo que estaba al nivel del Santa Teresa 1796.

Fue una grata sorpresa, un ron muy delicado, con sabores que me recordaron a las almendras y, curiosamente, a una torta de almendras, a algún cumpleaños me habrá transportado jajaja. Otra versión excelente de los rones venezolanos.

Para el final quise dejar lo que para mí era lo mejor de todo. Chocolate venezolano, hecho con cacao de origen bean to bar. Soy fanática absoluta del chocolate artesanal que se elabora en Venezuela, me cuesta mucho conseguir barras de tal calidad como estas que recibí de regalo.

Una de las barras es la versión 90% de Chocolate Valle Canoabo, que existe también en sus versiones de con menor porcentaje, desde 60%, pero aun así, como buena fanática del chocolate negro, me alegró mucho recibir la más concentrada, ya he dicho que mis buenos amigos me conocen bien.

Recordar el sabor de este chocolate fue una maravilla, siempre ha sido uno de mis favoritos y hasta ahora, no hay ningún otro que se compare con el característico sabor que continuan replicando en la Hacienda San Cayetano.

El otro chocolate que recibí fue un Franceschi Río Caribe 70%, una sorpresa muy agrabable, pues este era otro producto que hace muchos años no probaba. Muy sabroso y delicado. Me sorprendió el etiquetado de los valores nutricionales, porque desconocía que se estuviese empleando en Venezuela, me recordó mucho al que me encontré en los productos chilenos que probé en el >>video anterior<<.

Ha sido muy divertido volver a compartir con un vlog, esta cata de productos. Creo que podría desarrollar gusto por realizar este tipo de reseñas, pero resoplando tengo que admitir, que me cuesta mucho llevar a cabo todo el proceso, cuestiones de tiempo y vida de subempleo jajaja.

Lo mejor de todo esto, ha sido que yo no me esperaba este detalle por parte de mis amigos, fueron varios los productos que no había probado hace mucho, por lo que se desataron dentro de mí muchos recuerdos ligados a estos caprichitos.

Espero que las fotos hayan servido de guía por si a alguien le interesa el detalle de algún producto, sé que no es tan fácil conseguirlos fuera del país de origen, pero cada vez hay más importadoras y comercios a nivel mundial que distribuyen artículos Venezolanos, el mercado internacional no para de pedirlos.

Me despido con la fotos de los amiguitos con los que terminé pasando el rato de edición tras haber grabado la reseña, no podría quejarme en lo más mínimo de ninguno de ellos. Hasta una próxima oportunidad y, sea quien sea que lea esto, ¡Salud por ti!.