Retomando donde quedamos al final del capítulo anterior, nos vemos totalmente asediados por Locust de todos los tipos y colores a lo largo de todo el tren de carga. Es la primera vez que me quedo sin balas de casi ningún tipo en una pelea, una digna situación para el final del juego.

Como no podían faltar literalmente todas las criaturas a pie del juego, apareció una Berseker, en el momento la sensación que sentí por dentro fue muy similar a las caras de Marcus y Dom, sin saber como íbamos a matar a esa cosa sin utilizar un Martillo del Alba.

Al final, luego de morir algunas cuantas veces. Encontré que la mejor manera de matar a la criatura, era simplemente desprendiendo uno de los vagones del tren y la gravedad más la velocidad a la que se estaba moviendo el tren, harían el trabajo sucio. JAJAJA.

Aunque los problemas no se remontaron solamente a Locust normales. Las hordas enemigas decidieron traer inclusive jinetes alados. Para nuestra suerte el tren contaba con ametralladoras montadas, listas para dar fuego a diestra y siniestra a todo lo que se atreviera a entrar en nuestro rango de disparo.

No tuvimos tiempo ni para descansar en el suelo luego de ser abatidos. Literalmente el mismo curso de la pelea te obliga a darlo absolutamente todo. Pueden apreciar en el Gif, que nada más al levantarme Nayfull, tuve que agarrar la minigun para darle con todos a los enemigos JAJAJA. Aunque ese tipo de intensidad en peleas me resulta realmente atractiva, junto con un buen nivel de dificultad.

Obviamente no podían faltar nuestros buenos amigos "Desgraciados" en su versión explosiva. Claro, dentro de un vagón lo que los hacía mucho más peligrosos. De igual manera, nada que no se pueda manejar con una buena Escopeta Gnasher lista para reventarlos a todos.

Hasta que finalmente, llegamos al Jefe final del juego. Un "Reaver" que además de ser realmente poderoso, cuenta con el poder de controlar a esas especies de aves negras que son sensibles a los rayos UV. Por suerte, Cole contaba con un reflector dentro del helicoptero y nos proporcionó apoyo aéreo.

Aunque inclusive sin los pájaros que lo vuelven inmortal, el Reaver está armado con una ametralladora de doble cañon lista para reventarnos.

La batalla, terminó siendo de proporciones colosales, lleno de disparos y explosiones por todos lados.

La realidad es que es realmente difícil, morimos muchísimas veces PERO, finalmente lo logramos. Aunque no lo mostraré en gifs, sucede que al final de la batalla tuvimos un bug, hasta ahora el más grande que he presenciado en un juego de Gears of War, pero creo que prefiero que puedan verlos por ustedes mismos. Yo estaba estupefacto, no podía creer lo que mis ojos estaban presenciando Jajajaja, aunque la verdad es que no había mejor manera de terminar un juego tan bueno pero a la vez, que nos acompaño con tantos bugs.

Espero que hayan disfrutado de la serie tanto como yo y nuevamente, les agradezco a todos por acompañarme a lo largo de este viaje. Saludos!