Mi historia migratoria, Parte I

La vida te da sorpresas sorpresas te da la vida, dice el gran Ruben Blades, y en esta linea, el emigrar fue una sorpresa muy grande que jamás creí que iba a tener que tomar para dejar mi país y con este a mis amigos y mis rutinas. Y la otra sorpresa que también se presento en esta ocasión es que también mis amigos dejaron el país y también mi país dejo de serlo.

Cuando llegue a Colombia entendí en carne propia un aspecto fundamental de la vida y es que la única cosa que no cambia es que todo cambia y que si algo nos ha permitido a los seres humanos erigirnos como especie dominante de este planeta es el hecho de que somos extremadamente adaptativos a los cambios que la naturaleza nos impone por más rudos y extremos que sean.

Les aclaro que aunque esta travesía estaba premeditada jamas pensé en quedarme en Colombia pero como les dije en el párrafo anterior tuve que hacer uso de las ventajas que mi especie me concedió para poder avanzar hacia un futuro mejor. Les confieso que al embarcarme en esta aventura el miedo me invadió pero sin embargo no deje que esto paralizara mis acciones y esto fue lo que me llevo a seguir adelante. Por ello aquí les comparto en esta primera parte un poco de mi historia. Espero que les guste

UN ABRAZO Y LA MEJOR DE LAS VIBRAS PARA TODOS USTEDES

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